ARGENTINA 2 CHILE 0 - CON LA MAGIA DE RIQUELME Y TODO EL RESTO DE MESSI

El desarrollo fue parejo hasta que el juvenil rosarino dejó la derecha; Basile confundió con las subidas de Cambiasso y Heinze; faltó peso en el área

Nadie, ni el más fanático admirador de Gabriel Heinze, pensó que el defensor central convertido en lateral izquierdo iba a tardar sólo 42 segundos en llegar hasta el fondo del campo de juego y tirar un centro. No porque se dude de sus condiciones, pero justamente la asimetría que existía, en la previa, en el equipo argentino por las bandas, hacía creer que la Argentina iba a depender exclusivamente de lo que pudieran generar Zanetti y Maxi Rodríguez por el sector derecho. Error. Porque en el repaso de las proyecciones, se conectaron más en ataque Heinze y Cambiasso.

Claro que para que esto sea posible, primero Alfio Basile debió hacer un retoque en el esquema inicial. Es que Argentina perdía en ese sector porque el Comisionado Fierro dominaba a Cambiasso y Rubio complicaba a Heinze. Las dos llegadas de Chile en la primera etapa fueron por ese sector, una con un disparo de Fierro y otro de Suazo. ¿Qué hizo Basile? Cambió a Messi de sector. Si bien el delantero aparece como extremo derecho en Barcelona, el paso a la izquierda cumplió dos funciones: bloqueó el ataque chileno (el equipo de Bielsa no llegó más), preocupó a Alvarez y Ponce y liberó la zona para los avances de Heinze y Cambiasso, éste último socio de Riquelme en la creación del juego.

Argentina demostró superioridad a partir del primer gol de tiro libre de Riquelme. Chile fue fiel al esquema preferido de Marcelo Bielsa (3-3-1-3) y eligió presionar en zona 2 (en la mitad de la cancha), recién cuando Mascherano, Rodríguez, Cambiasso y Riquelme tomaban contacto con el balón. No fue casualidad que Iturra encime a Riquelme, aunque no llegó a hacerle marca personal. Chile propuso un esquema combativo y, por momentos, abusó de las infracciones, a tal punto que si no hubiera sido por las contemplaciones del juez Vázquez hubiera tenido más expulsados. Pero no se replegó y si no atacó fue porque no pudo.

Para Bielsa hubiera sido más fácil armar una línea de cuatro defensores cuando a los 8 minutos fue expulsado Alvarez para evitar la goleada, pero siguió con un 3-3-3, aunque bajó como stopper a Vidal. El DT de Chile también sorprendió a su manera. Quedará como una duda el ingreso en el entretiempo de Salas para que juegue con Suazo. ¿No era que Batistuta y Crespo no podían jugar juntos?

Ahora bien, ¿qué culpa tiene Bielsa si les exige a sus jugadores no hacer faltas cerca del área y luego Argentina gana por esa vía? ¿O si Alvarez comete una infracción tonta con la mano en la puerta del área y luego se hace expulsar al comienzo del segundo tiempo? Está claro que Chile intenta demostrar cosas del sello de Bielsa (la presión, ser protagonista, el sistema táctico), pero esto es sólo el comienzo de un largo camino.

Argentina fue inteligente para darse cuenta de que los toques de primera son una forma de contrarrestar la presión de un equipo de Bielsa. Ayer hubo una acción muy buena así entre Riquelme-Messi-Cambiasso-Maxi Rodríguez, pero no fue algo aislado. Así le hizo el gol Tranquillo Barnetta en el amistoso que Suiza le ganó a Chile por 2 a 1 en el debut del DT, con tres pases de primera antes del disparo del delantero, pero ayer al equipo del Coco le faltó una mayor precisión en el final de las jugadas y una referencia más definida en el área para hacer más notorio su predominio. Porque hubo veces que entre Riquelme, Messi y Cambiasso tiraron paredes que levantaron el "ole" de los hinchas, pero fueron intrascendentes, muy lejos del área rival.

Cerca del final, Suazo, transformado en wing, le cometió una infracción a Heinze en la puerta del área chilena. Fue una postal del partido y de quién corrió a quien en los duelos personales.

• 9 veces llegó Argentina al arco rival, contra las 4 de Chile, pero hasta el gol de Riquelme el conjunto chileno había creado dos situaciones de riesgo, contra sólo una del equipo de Basile.

• 7 infracciones le hicieron a Messi contra las 4 que cometió el delantero de Barcelona; Argentina fue superior, pero pisó poco el área de Chile.